Este 2018 viene cargado de noticias, dispuestas para hacernos viajar por un arcoíris de estados anímicos. Y como la vida ya tiene bastante drama, hemos elegido 10 comedias que se integran a la oferta televisiva de Netflix y te (re) enamorarán. De La Llamada, el musical que Javier Ambrossi (Madrid, 1984) y Javier Calvo (Madrid, 1991) idearon en 2013 como una obra de teatro y adaptaron en 2017 a la enorme pantalla, a cintas de Disney como Buscando a Dory (2016) o Alicia por medio del espejo (2016), segundas partes que sí fueron buenas. Sin olvidar bodrios de culto como Ponte en mi lugar (2003) o Cheque en blanco (1994).

El extenso film cuenta la historia de María y Susana, dos jovenes de diecisiete años que están en el campamento de verano católico La Brújula, al que van desde su niñez. Las dos sienten pasión por el reguetón y el electro latino, pero las visualizaciones de Dios a María comenzarán a editar sus vidas.

Los realizadores enarbolaron una trama alucinante y melancólica, pero aderezada con un humor surrealista y alocado. Entre las divertidas coreografías y las canciones que conforman la banda sonora,1​2​8​ la película protege la independencia individual, el respeto a las configuraciones vitales de cada individuo y la consideración de ser uno mismo, además de comunicar el mensaje de que jamás es tarde para que alguien descubra su sendero en la vida, se lance a perseguir sus sueños y se otorgue a quien quiere sin prejuicios ni miedos.

Ahora te mostramos de qué se trata ésta película. Ver trailer aqui.


 

Fue una calurosa tarde de junio cuando Netflix llegó a España. Corría el 2015 y aún desconocíamos lo bastante que esta interfaz iba a cambiar nuestra vida. Qué caprichosas son las noticias tecnológicas, tan rápido ajenas como vitales. Tres años luego, no imaginamos otra forma de consumir nuestras series y películas preferidas que con ésta y otras interfaces de uso contínuo multimedia.

Las actualizaciones de Netflix son permanentes y enumerar cuántos productos audiovisuales hemos devorado en 2017 sería una labor hercúlea para la que necesitaríamos comprobar nuestra playlist. Posiblemente si contabilizásemos los minutos consumidos diera como resultado un número impronunciable y que, en un primer impulso, nos llevásemos las manos a la cabeza. Pero quién contabiliza los buenos ratos que nos han informado todas esas series, películas y documentales.

 

por Carla

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